Métricas

Merma total (diaria/semanal/mensual)

Indicador que cuantifica el volumen total de producto desperdiciado en planta, expresado en kilogramos. Se calcula a partir de los registros reportados por los operarios en el momento de ocurrencia de cada incidencia, y se consolida en función del corte temporal definido (día, semana o mes).

Este KPI permite tener una visión directa y objetiva del nivel de pérdida operativa en cada periodo, y es la base sobre la cual se construyen análisis más profundos por línea, turno, causa o producto. Su seguimiento continuo permite identificar desviaciones, evaluar la eficacia de acciones correctivas y establecer objetivos de reducción.

KPIs PRODUCTIVOS

Merma por familia de productos

Indicador que segmenta el volumen total de merma en kilogramos según la familia de producto a la que pertenece cada unidad afectada. Esta métrica permite identificar qué grupos de productos concentran mayores niveles de pérdida operativa, independientemente de la línea o turno en el que se hayan producido.

La clasificación por familia se obtiene a partir de los datos reportados en planta y procesados mediante reglas predefinidas, lo que permite un análisis transversal que relaciona tipos de producto con frecuencia e impacto de incidencias. Este KPI es clave para orientar mejoras específicas en diseño de procesos, ajustes de máquina o formación de operarios, según el comportamiento de cada familia de producto.

Merma por turnos

Indicador que cuantifica el volumen de merma (en kilogramos) reportado en cada uno de los turnos operativos definidos por la planta: Mañana (M), Tarde (T) y Noche (N). Esta clasificación se realiza a partir de la selección manual del turno por parte del operario en el momento de registrar la incidencia, lo que permite asociar con precisión cada evento al contexto horario en el que ocurrió.

Este KPI permite analizar variaciones en el desempeño operativo entre turnos, identificar posibles desviaciones en la ejecución de procedimientos y evaluar la consistencia del proceso productivo a lo largo del día. Es una métrica fundamental para los responsables de línea y producción, ya que facilita el seguimiento por franja horaria y contribuye a una mejor planificación de recursos humanos y técnicos.

Top líneas con mayor volumen de merma

Este KPI identifica las líneas de producción que han generado el mayor volumen de merma (en kilogramos) durante un periodo determinado, ordenándolas de mayor a menor. El análisis puede aplicarse a cortes diarios, semanales o mensuales, y permite configurar dinámicamente el número de líneas a visualizar (Top 3, Top 5, etc.).

La información se extrae directamente de los formularios reportados por los operarios, donde se especifica la línea afectada en cada incidencia. Este indicador es clave para detectar focos críticos dentro del proceso productivo, asignar prioridades de intervención, y hacer seguimiento a acciones correctivas o preventivas implementadas en líneas específicas.

Su visualización en forma de ranking o gráfico de barras facilita la comparación directa entre líneas y permite a los responsables de planta, mantenimiento e ingeniería focalizar recursos en aquellas áreas que representan el mayor impacto operativo.

Top incidencias con mayor volumen de merma

Este KPI identifica las incidencias operativas (tipos de causa) que han generado el mayor volumen de merma en kilogramos dentro de un periodo determinado, según el corte temporal, la línea de producción y la familia de producto definidos por el usuario.

Las incidencias se clasifican bajo una estructura común —Avería, Fallo humano, Factor externo y Controles— y se registran directamente por el operario al momento de ocurrencia a través del formulario estructurado. El sistema permite aplicar filtros dinámicos para visualizar el Top N de causas más relevantes en función del contexto de análisis (por línea, por familia, por semana, etc.).

Este indicador es esencial para identificar patrones repetitivos de pérdida, priorizar acciones correctivas y orientar decisiones técnicas de mantenimiento, ingeniería y operación. Su presentación en formato ranking o gráfico facilita una lectura rápida y comparativa del peso que tiene cada tipo de incidencia dentro del total de merma registrada.

Frecuencia de incidencias

Este KPI contabiliza el número total de incidencias operativas registradas dentro de un periodo de análisis determinado, permitiendo su filtrado por familia de producto, línea de producción, turno o cualquier otro criterio relevante para el cliente. Las incidencias corresponden a causas operativas específicas (Avería, Fallo humano, Factor externo y Controles), seleccionadas directamente por los operarios en el momento de su ocurrencia.

La frecuencia de incidencias refleja el comportamiento operativo del sistema productivo en términos de estabilidad y control. Un aumento en este indicador puede señalar fallos recurrentes, problemas estructurales o falta de estandarización en los procesos. Su desagregación por línea, producto o turno permite realizar un análisis detallado de dónde y cuándo se concentran los eventos que comprometen la eficiencia operativa.

Este KPI es fundamental para el seguimiento de la mejora continua, ya que permite evaluar la efectividad de las medidas implementadas y anticiparse a desviaciones operativas mediante análisis comparativos entre periodos o unidades productivas.

Comparativa intersemanal de mermas y/o frecuencias

Este KPI permite analizar la evolución de las mermas registradas (en kilogramos) y/o la frecuencia de incidencias operativas a lo largo de varias semanas consecutivas, facilitando la identificación de tendencias, estacionalidades o desviaciones persistentes en el comportamiento productivo.

El análisis se puede segmentar por línea de producción, familia de producto, tipo de incidencia o turno, adaptándose a las necesidades específicas de seguimiento del cliente. Los datos se agrupan en función del corte temporal definido y se representan en formato gráfico para facilitar la comparación visual entre semanas.

Esta comparativa es clave para evaluar la efectividad de acciones correctivas implementadas, detectar recurrencias, validar hipótesis de mejora continua y establecer alertas tempranas sobre comportamientos anómalos. Su integración dentro del sistema permite realizar un seguimiento proactivo del rendimiento operativo y anticiparse a desviaciones antes de que generen un impacto mayor.

KPIs ECONOMICOS

Coste total de la merma

Este KPI cuantifica el impacto económico total asociado a las mermas registradas durante un periodo determinado, expresado en unidades monetarias (€). El cálculo se realiza a partir de los volúmenes de merma reportados por los operarios en planta y de los costes unitarios proporcionados por el departamento financiero del cliente, definidos por producto, línea o familia.

El indicador puede presentarse con diferentes cortes temporales (diario, semanal, mensual) y desglosarse por variables como línea de producción, tipo de incidencia, familia de producto o turno, lo que permite comprender con mayor precisión qué áreas, causas o productos están generando el mayor impacto económico dentro del sistema productivo.

Este KPI es clave para alinear la visión operativa con la financiera, facilitar la priorización de acciones correctivas y justificar inversiones en mantenimiento, ajustes de proceso o mejora continua. Su análisis periódico permite monitorear tendencias de pérdida económica y evaluar el retorno de acciones de mitigación implementadas.

Coste por línea de producción

Este KPI permite cuantificar el impacto económico total de la merma atribuida a cada línea de producción durante un periodo de análisis determinado. El cálculo se realiza multiplicando los volúmenes de merma (en kilogramos), reportados a través de los formularios operativos, por los costes unitarios específicos proporcionados por el cliente para cada producto o familia asociada a esa línea.

La segmentación por línea de producción permite identificar con precisión qué unidades operativas generan mayor pérdida económica, independientemente del volumen de producción. Esta métrica es fundamental para la gestión estratégica de planta, ya que permite priorizar intervenciones correctivas, reasignar recursos operativos y evaluar la rentabilidad comparativa entre líneas.

Además, su análisis recurrente facilita el seguimiento del impacto financiero de las acciones de mejora implementadas y proporciona un puente claro entre datos operativos y decisiones financieras, alineando producción, mantenimiento y dirección en torno a objetivos económicos concretos.

Coste por familia de producto

Este KPI calcula el impacto económico acumulado generado por la merma de productos pertenecientes a una misma familia durante un periodo determinado. El valor se obtiene multiplicando los kilogramos de merma registrados en cada incidencia, clasificados por familia, por el coste unitario específico asignado a dicha familia por el departamento financiero del cliente.

El resultado permite visualizar con claridad qué familias de producto concentran las mayores pérdidas económicas, independientemente del volumen de producción o del número total de incidencias. Esta información es clave para tomar decisiones relacionadas con la rentabilidad del portafolio, la optimización de procesos específicos, o el rediseño de productos con mayor sensibilidad a errores operativos o técnicos.

Al descomponer el coste por familia de producto, se facilita la alineación entre los equipos de producción, calidad, mantenimiento y finanzas, permitiendo focalizar esfuerzos de mejora continua en los grupos que generan mayor impacto económico dentro del sistema productivo.

Coste por turno

Este KPI permite cuantificar el impacto económico total de la merma generada en cada turno operativo (Mañana, Tarde, Noche), considerando tanto el volumen de pérdida como el valor económico asociado. El cálculo se basa en los registros realizados por los operarios al momento de la incidencia, donde se indica el turno correspondiente, la línea afectada y la familia de producto involucrada.

A partir de esta información, y utilizando los costes unitarios proporcionados por el cliente para cada producto o familia, se estima el coste total de la merma en función del turno. Este análisis puede segmentarse por línea de producción y familia de producto, permitiendo una visión multidimensional del impacto financiero por franja horaria.

Este KPI es esencial para detectar desviaciones operativas recurrentes por turno, evaluar la eficiencia de los equipos en distintos horarios y tomar decisiones fundamentadas sobre distribución de recursos, rotación de personal o ajustes en la planificación de producción. Además, establece una conexión directa entre el comportamiento operativo y sus consecuencias económicas, facilitando el alineamiento entre planta, ingeniería y dirección financiera.

Top incidencias más costosas

Este KPI identifica las N incidencias operativas que han generado mayor impacto económico en un periodo determinado, calculado a partir de los volúmenes de merma reportados y los costes unitarios asociados a cada producto o familia. El ranking puede configurarse para mostrar las Top 5, Top 10, etc., y permite su segmentación por línea de producción, familia de producto, o cualquier corte temporal definido por el cliente (diario, semanal, mensual).

Cada incidencia reportada por los operarios incluye variables como tipo de causa (Avería, Fallo humano, Factor externo, Controles), línea, turno y producto. El sistema procesa estos datos, vincula cada caso con su coste asociado, y genera un listado ordenado de las incidencias con mayor coste económico.

Este KPI es esencial para la priorización técnica y estratégica, ya que permite focalizar los esfuerzos de mejora en aquellas incidencias que generan mayor pérdida financiera, independientemente de su frecuencia. Asimismo, facilita la identificación de patrones críticos, problemas estructurales o puntos de fallo con alta repercusión económica.

Su visualización en forma de tabla dinámica o gráfico de barras ofrece una lectura directa para mandos intermedios, equipos técnicos y dirección.

KPIs FIABILIDAD OPERATIVA

Incidencias recurrentes por línea

Este KPI identifica las incidencias operativas que se repiten con mayor frecuencia dentro de una misma línea de producción, permitiendo analizar su recurrencia tanto en términos de número de apariciones como de persistencia temporal (número de semanas en las que se han registrado). La métrica puede calcularse sobre un corte temporal específico (diario, semanal, mensual) o a lo largo de un periodo extendido para evaluar comportamientos repetitivos.

Cada incidencia es registrada en planta por los operarios mediante formularios estructurados, incluyendo variables como tipo de causa, línea afectada y fecha de ocurrencia. A partir de estos datos, el sistema agrupa las incidencias por línea y determina cuáles se repiten con mayor frecuencia y durante más semanas, revelando patrones de fallo estructural o problemas no resueltos en determinadas líneas de producción.

Este KPI es clave para mantenimiento e ingeniería, ya que permite enfocar los recursos técnicos en problemas crónicos, evaluar la eficacia de acciones correctivas implementadas y anticipar fallos futuros mediante análisis predictivo. Su visualización como ranking o matriz temporal facilita la toma de decisiones en reuniones de seguimiento técnico y planes de mejora continua.

Frecuencia de averías por máquina

Este KPI mide la cantidad de averías registradas en cada máquina específica a lo largo del tiempo, permitiendo identificar comportamientos recurrentes y realizar un análisis temporal de su distribución semanal. Cada evento es reportado en planta mediante formularios estructurados, donde el operario indica el tipo de incidencia (en este caso, Avería) y el equipo afectado.

El sistema agrupa los datos por máquina y contabiliza tanto el número total de fallos como las semanas distintas en las que ha ocurrido al menos una avería, generando así un patrón de recurrencia. A partir de esa distribución, se puede estimar la probabilidad de fallo de cada máquina en semanas futuras, utilizando modelos de ocurrencia binaria y frecuencia relativa.

Este KPI es fundamental para mantenimiento predictivo, ya que permite anticiparse a interrupciones no planificadas, programar inspecciones proactivas y asignar recursos técnicos de forma más eficiente. También facilita la toma de decisiones sobre rediseño de piezas, ajustes de parámetros operativos o inversiones en reemplazo de maquinaria crítica.

Su visualización puede presentarse como un ranking de criticidad por máquina, acompañado de gráficos de tendencia semanal y cálculos de probabilidad de fallo proyectada.